17.9.18

Extraño

Hace mucho tiempo que no tenía tanto tiempo para estar conmigo mismo. Me gusta tener un espacio dedicado para mí. Un día entero en el cuál no tengo que cumplir ninguna expectativa social y puedo disfrutar de quedarme en pijama hasta que me aburra. Sin ducharme. Riendo. Llorando. Recordando.

No recuerdo cuándo fue la última vez que había estado así. Todo el día en casa. Cocinando. Pensando. Viendo como el cielo va cambiando de color durante todo el día. Sin conversar con alguien. Leyendo. Viendo una temporada completa de una serie intensa que me permita mantenerme concentrado en la trama, para evitar pensar en todas las ideas que revolotean en mi cerebro.

Y aún así, es inevitable que aparezcas. Tan solo es necesario que aparezca alguna escena de la serie para desencadenar tu recuerdo de forma brutal. Y esa escena -cualquiera que sea- tiene un punto de inflexión inminentemente romántico. En algún momento es por la celebración de compartir la vida con alguien indispensable, mientras que otras es por haber tomado una decisión en particular. No puedo mentirme. Me gusta ser fiel conmigo mismo, así como me gusta disfrutar el tiempo conmigo mismo, pero aún si te extraño.

Extraño. Al escribir esa palabra, se me caen las lágrimas. Aparecen lentamente unos mocos que me impiden respirar con normalidad y se me cierra el pecho de solo pensar que me equivoqué. Mi corazón se entristece -que cursi puedo ser en este estado- y tengo que volver a sonarme la nariz una vez más. Hoy no eres más que eso. Un extraño, y un vago recuerdo, pero una constante sensación de no volver a cometer el mismo error y de disfrutar la vida cómo lo hice contigo. No tener miedo a compartir mi vida con alguien, de dejarme querer por alguien tan noble como tú. De dejar de lado mis mis análisis objetivos sobre las situaciones y dejarme llevar por las emociones reales. Es una sensación de alegría y nostalgia juntas, en medio de miles de recuerdos de los viajes que hicimos.

Ojalá algún día me puedas perdonar. Me costó entender mis errores, pero el tiempo es sabio. Por haber tenido tanto miedo de involucrarte en mi vida y de mantener el terror de abandonar el orgullo generado en los otros. Por no haber querido dar un esfuerzo adicional. Por tener miedo de ser herido primero. Por haber huido de forma tan cobarde. Por sacarte así de mi vida, de nuestra vida.

Es irónico pensar que mi vida ideal sería como un nómada exitoso. Lejos de todo el mundo, conociendo gente nueva todos los días. Disfrutando cada instante porque tal vez no existan más después. Pero hoy me doy cuenta que lo único que puede hacer una vida ideal, es tener con quién compartirla. Sea con la familia, con los amigos, con las personas de la oficina, con los que practicas yoga o incluso con alguien como tú. Alguien que me admire, me cuide y me acompañe.

Una vez más, gracias por enseñarme lo que significa la vida ideal y el amor.
Es el momento de dejarte ir; de estar conmigo mismo.

15.1.16

Trotamundos

Hace menos de cuatro meses me imaginaba cómo sería vivir en otro país. Hace varios años me imaginaba viviendo fuera de casa, en algún país exótico, haciendo una pequeña contribución a la sociedad, la que sea, pero positiva. Hace un par de décadas mis padres sólo se preocupaban que coma todas mis comidas, que no me diera frío y que esté feliz. 

Hace un par de años quería encontrar mi primera práctica, algo que sea extrañamente jurídico pero práctico. Hace un par de meses el estómago me alertaba de que el fin de mi carrera se acercaba, hace un par de días celebramos los 56 años de mi padre. 

Me gusta planificar ciertas cosas. Me encanta ordenar todo. Mi vida está planificada y se resume en lo siguiente: felicidad, viajes, vino, café, música y amor. Suena bastante sencillo, pero la vida debiese ser de esa forma. No hemos venido a desperdiciar el tiempo siendo amargados o llorando, por lo menos pienso volcar todos mis esfuerzos posibles para que esté tranquilamente feliz. 

Es la primera vez que vivo solo. Es la primera vez que vivo solo en otro país. Es la primera vez que trabajo. Es la primera vez que vivo solo en otro país y trabajo. No habría imaginado estar en esta situación hace seis meses atrás, pero (por más cursi que suene) sabía que la vida me tenía preparado mil aventuras, las mismas que me llevarían suficientemente lejos como para sentirme ajeno al mundo y al mismo tiempo parte esencial. 

Había olvidado lo mucho que me gustaba escribir. Lo mucho que me gusta estar con mi familia en la sobre mesa, cantar cumpleaños feliz, abrazarlos, sentirlos cerca. Nostalgia positiva para valorar lo bueno de la vida, ¡lo bueno de estar vivo!

2.9.14

it is what it is

Simplemente ha dejado ahí, una idea que siempre estuvo así.

20.11.12

οικογένεια

Caminar por el mismo sendero todos los días parece ser bastante rutinario. En realidad, lo es. Pero hoy sentí algo diferente. Creo que fue más por la salida del sol y una buena canción en mis oídos que toda mi perspectiva cambió. La depresión se hizo a un lado, un poco lejos de la realidad y las ideas empezaron a esclarecerse.

Pueden haber sido dos meses increíblemente alucinantes, lleno de experiencias, pero sobre todo de sensaciones. Sigue su rumbo de acuerdo a lo que debe ser; ahora sí más tranquilo.

Sigo sintiendo los rayos de sol y el viento sólo puede decir una palabra: alpha. 

Una llamada pone de pies todo el status quo actual, ese régimen dictatorial y poco comprensivo empieza a relucir. La mierda poco a poco sigue llegando para explotar.
                                                           
                         Uno,
         dos,
                                          tres.

Se acerca, pero sobre todo aleja.

10.5.12

inanis

Pocas son las veces en donde me pongo a pensar en una idea recurrente. Mentira. Siempre ha cruzado por mi mente --dentro de las más íntimas neuronas-- esa palabra. Sí. La muy reconocida y poco agraciada. Se llama muerte.

Siempre pasa por mi cabeza. Son tantas las veces en las que me he puesto a pensar en ella que me asusta un poco la idea de saber que no tiene fecha de llegada. No, todavía no puedo agendarla. Ya sé que lo haré la próxima semana: El lunes clases todo el día, examen de esto, del otro y práctica del peor. Almorzar con fulanito, encontrarme con menganito y por qué no venderle algo a sultano. Sí, ya está todo planeado. Tengo tal y esta otra cosa para hacer. Necesito un poco más de tiempo, leer, escribir, resumir. Dormir si es que puedo, tomar café para no pestañear.

Llegar a mi casa, hablar con mi papá, abrazar a mi mamá, reírme con mi hermano. Comer los cuatro juntos. Sí, algo tan normal. Lavarme los dientes, bañarme, rezar, dormir. Despertar y seguir andando con la misma rutina de todos los días. Extraño los días en Manaus, a veces eran un poco rutinarios también. Pero me gustaba caminar más, ver el cielo enorme con las nubes gigantescas y respirar aire puro. Escuchar a todos hablar o taparme los oídos con Delgadillo en el fondo. Escuchar la ñ sin que suene extraño. Conversar en otro idioma, esperar el micro y llegar a la ONG. Sí, sí. Todo era divertido. Salir y todo. Tomar mi avión y llegar a Lima, a seguir.

Correr para una clase, para el micro, para ir al baño. Caminar mientras le das la última ojeada al resumen antes de la clase, porque fijo hay práctica. En verdad, ni sé. Revisar tu celular: tienes cinco mil mails, llamadas perdidas, cinco personas hablándote por el bbm, twitter, facebook. Sí, todo sigue normal. Revisas que todo esté en su lugar, las monedas para comprar algo que te llene el estómago. Para las copias. Busco la llave para el locker y sí todo sigue igual.

Coordino con mi mejor ejemplo para regresarnos. Sí, escuchando buena música, ríendo, renegando porque un taxista te choca y no deja huella. Porque tu papá te llama y te karmea el día entero. Me quejo de mis notas, mis profesores. Lloro por mis ideales frustrados y mis pedazos de corazón regados en medio de la Costa Verde. Una mirada de complicidad para burlarte de lo que hablan atrás.

Sí. No es extraño, todo sigue normal. Hasta que cierras los ojos.

 - Para siempre -

Justo te peleas con tu mamá. Te molestas por algo que te dice tu papá. Tu hermano te decepciona. Te olvidas de decirle a tu mejor amigo todo lo que vale. Te quedas con un cd para tu ex. Reniegas por un curso. Te quejas por comer lentejas. Le gritas a un desconocido. Dejas de decirle te quiero a alguien importante porque ya habrá otra ocasión. No llamas a tu abuelo.

¿Por qué? Porque sabes que despertarás y mañana todo será mejor, cambiarás o probablemente habrá otro día para arreglar las cosas. ¿Estás seguro? Tienes tantos sueños y tantos planes que crees que tendrás todo el tiempo del mundo para realizarlos y ser feliz. Pero, ¿de qué sirve estar amargado durante el trayecto y no disfrutar el camino? La felicidad no es una meta, es un estado. Es disfrutar todo. Es sentir y gustar las cosas internamente y hacer un cambio positivo a cada segundo.

Sí, lo acepto. Tengo miedo de morir. No estoy preparado para dejar todo así, todo sigue inconcluso. Sí, tienes razón, somos pasajeros y tenemos un límite. Pero tengo miedo de no vivir. Quiero vivir hoy, porque sólo ese hoy importa.

Tengo miedo, quiero que llegues a mi cuarto y me digas que no estoy solo. Que me acompañes mientras duermo y me digas que todo estará bien. Te llevaste una parte enorme de mi corazón y tengo miedo de que si alguien más se va, también se lleve y me quede vacío. Como un agujero negro enorme sin sentido. Cántame mientras duermo. Sí, amigo, a ti también te extraño: por más raro que sea, pensando que algún día nos veríamos para reírnos y dejaste de estar acá sin despedirte. Te fuiste por algo, se fueron porque era hora.

Nos volveremos a encontrar y sólo dejo una coma porque sé que queda mucho por hablar,

4.3.12

Paixão




El alma es el único suspiro que nos mantiene vivos.

11.2.12

Loira

El estómago lleno de más y los ojos mirando al vacío. Una pregunta lo cambia todo.
¿Estás bien? Responde todo lo que ha pasado y aún así no consigue discernir si en realidad lo está.
Todo ha sido demasiado rápido, hace una semana que todas las noticias parecían parte de una radionovela. De aquellas que sólo escuchas, pero no ves. Y tu imaginación va a mil por diez. Es horrible esa sensación que le corta el aire en la garganta y va colocando un nudo enorme dentro de él. La tristeza empieza a llenar la vena como si fuese glucosa un miércoles de madrugada. Entra con fuerza y sólo busca una cosa: llegar al corazón.

Sólo la extraña. No puede dejar de pensar en ella. La tiene en mente y sólo quiere abrazarla. Ve fotos y se acuerda de todos los momentos que crearon. Recuerda sus caricias, sus labios. El olor inconfundible de su llegada y su risa natural. Llegan a la mente todas sus palabras y sus regalos, sus buenas acciones. Empiezan a aparecer en la mente todas las posibilidades que pudieron haberse dado si hubiese tenido coraje. Tal vez no era eso, tal vez era sólo la necesidad de sentir su falta. De ver que acontecería si ella no estuviese, y ya lo comprobó.

Ella es.

Es la glucosa que va entrando por la vena y curando todas las penas. Va dejando una sensación de tranquilidad y conforte. ¡Espera ahí! Empieza a escuchar una canción que no es parte de aquella historia, pero que será tan brillante como el sol y gritará al mundo que tiene su amor. Es parte todo de un proceso, de un paso a paso.

Es.

Es la sonrisa que hace falta, la pieza del rompecabezas inconcluso.

30.1.12

Let it be.

Las ojeras han crecido, Andrés. Están más moradas que antes. Mi corazón se está encogiendo. Extraño mucho tantas cosas. Sólo quiero aprovechar al máximo todo el tiempo que me quede acá. Sólo quiero eso: Vivir.

27.1.12

Cadé o coração agora ?

Siento que las paredes de mi cuarto se han convertido en un refugio. Son amarillas, un poco claras. La puerta que da a la sala es simple y se cierra con facilidad. La puerta que da a la calle, las puertas, tres, calle dan, es precisa para las noches. Siento que se ha convertido, de cierta forma, en las paredes verdes limeñas que todos los días veía. Pero no es lo mismo; desde escuchar otro idioma hasta comer farofa todo el día. Cada día me doy dando cuenta de que estar lejos de casa te acerca mucho más a ella. Empiezo a valorar todo lo que tengo y lo que no. Situación bastante predecible. Pero (siempre existe uno de éstos en toda historia, si no todo sería monótono y aburrido ) empiezo a cuestionar mis propios pensamientos, mi ideología. Mi forma de ser y de actuar. 

Es la hora de la verdad. Muchas veces, pongo a prueba mi personalidad. Poco a poco se va definiendo y sin darme cuenta me voy conociendo más de lo que pensé había estado cerrado. La nostalgia acaba de invadir el cuadrado amarillo. Bienvenida de nuevo, aunque no sé si es por la soledad o la lejanía que llegas. Incluso las garras han empezado a hurgar en los recuerdos. Espero que mis decisiones sean tomadas con calma y no me apresure. No se comete un error dos veces por casualidad. Pero tú no eres un error. 

15.1.12

Saudades de-

Tres semanas. 
Ya van más de veinte días y aún no escribo nada sobre aquellos. 

Diez minutos.
Más de un millón de segundos y aún no puedo comenzar. Creo que la costumbre es una habilidad que se debe practicar todos los días. Mientras que yo no he practicado lo suficiente. Las teclas se han ido convirtiendo en tan sólo un recurso vago y efímero. Necesito un lápiz, una hoja de papel en blanco y el cielo preciso.

Nostalgia de mi vida. Recién hoy me he puesto a pensar, extraño yo de ustedes, de ti.

28.11.11

Vicis

Lo hecho, hecho está. Pero aún hay demasiado por hacer. Se viene lo bueno, porque lo bueno es ahora. Mañana es sólo un espejismo.

20.7.11

Un gusto en conocerte.

There's no combination of words I can put in the back of a post card.
Nothing you'll say will be wrong only if you say it from your heart.

La búsqueda puede demorar tantas lunas llenas que incluso los animales se aburren de hibernar. Han sido tantas las horas desperdiciadas que las energías se han esfumado como el tabaco en mis pulmones, sí claro. Siguen impregnados ahí y no creo que se quieran ir. No quiero que se vayan, suelen ser la compañía perfecta a la espera de alguien. El tiempo seguirá pasando, pero el humo de mi cigarro sigue el viento de mis suspiros. De ésos que nacen sólo por ti; por verte sonreír. Poco a poco voy comprendiendo que uno no tiene que estar esperando algo por que todo lo que quieres ya lo tienes.

Lo bueno tarda, pero llega. Y llega de la mejor manera. Sin darte cuenta, sin encontrar una explicación racional, porque el corazón lo único que hace es sentir. Y debo dejar que todo fluya como la sangre que lo hace palpitar. Todo tienen un fin y un objetivo, que lo sepa o no, no siempre debe ser. Disfrutar al máximo es la única solución.

¿Solución? No. No hay ningún problema, es la única respuesta. No, tampoco. Es la forma de vivir. Un estado perpetuo, el de felicidad y no alegría. Demostrando cada día lo que sientes de la mejor manera. Siendo auténtico y honesto,

Bienvenida a mi vida, un gusto enorme.

12.7.11

El humo envuelve los secretos de la lluvia

El tabaco había decidido abandonar los pulmones del cuerpo, mas no del alma. Sigue recorriendo los alvéolos más íntimos y secretos. Poco a poco va despertando nuevas sensaciones. Incluso, se va acercando a un órgano bastante solitario; ese que sólo sangra y no deja de quejarse a gritos rasgando sus paredes. Ha sufrido una montaña rusa de emociones, como un badén en media carretera al sur andino; el estómago ocupaba su lugar y no sabía donde se había ido.

Tan rápido y tan ocurrente que parece ser irreal. Pero uno no decide cuándo, dónde ni mucho menos con quién; simplemente se da y sólo puedes dejar que fluya. Sigue rugiendo contra sus paredes, sus gritos se ahogan con una sonrisa gigante. A veces existen cosas que no necesitan explicación y pueden ser más válidas que toda una tesis existencial. La felicidad es un estado, no una emoción. Es una forma de vida que perdura, y se refuerza más si tienes alguien a quién sonreír.

4.6.11

Bitácora del Hombre de Hojalata

Ser exitoso en la vida es despertarte con ganas de comenzar el día de una vez.
Ser exitoso en la vida es estar ansioso por llegar a trabajar.
Ser exitoso en la vida es divertirse con cualquier persona.
Ser exitoso en la vida es acostarse y sentirse realizado por todo lo hecho en el día.

Ser exitoso es ser feliz; es vivir.

No es la primera vez que el hombre de hojalata busca un corazón. Su vida es bastante sencilla. Al despertarse no siente las ansías de encontrarse con sus amigos; incluso, no puede distinguir quienes son éstos. Sabe que hay mucha gente que le sonríe; le ayuda y le pregunta sobre sus sentimientos. Pero él no sabe que son. No comprende porque la gente a su alrededor se angustia tanto antes de un examen. Es simple. Si estudias, apruebas; si no, no. Sigue viendo gente llorar. ¿Lágrimas? ¿Qué carajo es eso? No comprende la finalidad de deshidratarse sin razón coherente. Alguien ha muerto, siempre pasa. Es parte del ciclo de vida. El hombre de hojalata sabe que, eventualmente, todos se irán. No logra entender por qué se abrazan y se ríen. ¿Risa? No tienen ningún sentido; es un gasto de energía innecesario. No alargará el rango de vida, la batería tiene un final definido.

Siempre ve personas agarradas de la mano. Acariciándose, besándose. Sonriendo, gritando y saltando por cualquier razón. ¿Para qué? ¿Por qué? No sabe qué es el amor; no lo concibe. Existe gente que muere, mata, llora, se queja por amor. Pérdida de tiempo, evidentemente. Músicas y novelas románticas y cursi que sólo mal gastan la potencialidad de las personas. Sabe quienes son sus padres, pero ¿día de la madre? Mercantilismo puro e innecesario gasto monetario. ¿Navidad? Por favor, eso es peor que gastar en una hamburguesa grasosa con mil calorías que incrementarán el colesterol. El hombre de hojalata tiene una fecha de creación; sí. Pero no entiende la emoción y la importancia de los saludos por su día. Se hace más viejo cada año, ¿qué gracia tiene?

Por todo esto, sigue buscando un corazón. Sabe que sólo así puede entender, un poco más, a los humanos. Pero dejará de lado una vida recta y objetiva. Sabe que su mente tendrá que lidiar también con un nuevo ente; será una batalla constante, diaria. Está seguro de que su mente prevalecerá por siempre y, que no se dejará llevar por sus nuevas adquisiciones: sus sentimientos. Busca ser exitoso y no comprende el camino para alcanzar esa meta. Así que le daremos un corazón. Nuevo, carmesí, fuerte e inmenso.

Bastó menos de un día para empezar a comprender a los humanos. Rió, lloró, se sonrojó. Se enamoró, se molestó, se deprimió. Sentía que caía de la catarata más alta y volvía a subir, para caer otra vez. Una y otra vez. Llegó a la conclusión de que es una carga bastante pesada. El corazón no es un tema sencillo, sentir es fácil. Comprender los sentimientos es lo complicado. Lidiar con ellos, nuestra cruz.

Corazón de hojalata, pero corazón al fin y al cabo: "Ser exitoso es saber amar. Sentir miedo y alegría en el mismo instante. Es enamorarte y decepcionarte de la persona equivocada o perfecta. Es desesperarte y angustiarte sin razón alguna. Ser exitoso es saber escuchar al corazón."

27.4.11

HARTEDAD

¡ Estoy HARTO !
El desorden invade todos los pulmones.