Se fue uno de los tantos. Sólo el hecho de pensar que comenzó de la manera menos esperada y con la cabeza dando vueltas. La arena y el frío eran sólo una parte del comienzo de una nueva aventura. Algo que no se vive nunca. No se vive antes, y mucho menos, después. Es simplemente una etapa de algo más grande. Pero sin darnos cuenta, cada parte hace valer la pena la grandeza.
Inusual comienzo, y mucho peor continuación. No esperaba algo así pero es que cada día vamos creciendo y la madurez se va apoderando de nuestra personalidad. Tiempo de estudiar. De dejar las ricas caminatas en medio de la arena con el sol poniéndose, sintiendo la brisa del mar. Y pensando en todo lo que el año me había regalado, por así decirlo. Esta vez no hubo tiempo para eso. Y mucho menos para evaluar mi desempeño dentro de mis parámetros personales y un poco exigentes. Simplemente comenzaba la rutinaria vida de un verano anormal.
Dijeron que valdría la pena. No mentiría sino fuese así. Lo vale, pero cansa. Será por algo. Tendrá alguna recompensa al final. Pero bueno, es rutinario y más de una vez pensé en abandonarlo.
-No seas imbécil. Date cuenta de todo lo que has ganado.
-Puta, quedarme sin raya y cagarme más de una salida por ahí.
-¿Y que hay de tus nuevos "amiguitos"?
-Valen la pena sí. Pero igual podría largarme ahora e igual serían siendólo.
-¿Y todo lo que has aprendido?
-Mis pelotas. Supongo que tendrá algún resultado. Sino las pierdo.
-Deja de quejarte.
Seguiré y punto. Pero han pasado más de mil situaciones de las cuales no puedo olvidarme. El simple hecho de sentirme incómodo muchas veces, y pero aún, de tener que pelearse con alguien como tú, te marca. Aún así no lo quieras. Pero bueno. No. Lo único bueno es que crecemos y aprendemos el uno del otro, como tú un día me escribiste en una de tus tantas misivas. Una de las cuales generó lágrimas en los ojos ya secos por un pensamiento del nuevo mes. Del nuevo año.
La vida sigue y seguirá. Felizmente este mes tuvo un buen final. Rima inusual que sale de acá. Pero bueno que se hará. Sí. Terminé más que feliz. No sólo por ti, sino también por ti. Ya se fue, y se fue más rápido de lo que creí. Fue bueno, eh. Y lo serán aún más.
